Así como leen en el título, la semana pasada fui a la última edición del ciclo Maridaje de Aguas & Vinos que organizaron la Distribuidora Ley Seca y Acqua Panna & S.Pellegrino.
Por ello nos recibieron Jorge Muñoz Olesti, gerente comercial de la distribuidora y Giulia Demaestri Duque, Marketer Developer de Acqua Panna & S. Pellegrino en la Argentina.
El ciclo se realizó en el marco del 50Best que se hace en Buenos Aires y del cual Acqua Panna & S. Pellegrino son sponsors.
Como dato de color (?) la degustación de los vinos, que fueron de Bodega Kaiken, estuvo dirigida por Fabricio Portelli.

El objetivo del ciclo fue catar las aguas de Acqua Panna & S. Pellegrino a ciegas, junto a un agua nacional, para comparar qué aportan (y qué no) al momento de tomar vino y comer. Ver si acompaña la comida, barre sabores, potencia, etc.
Más allá de lo interesante de poder apreciar por uno mismo la diferencia que tenía cada agua también fue un dato no menor lo que comentó Giulia al referirse a los terruños del agua.
Técnicamente, el agua puede ser de manantial, mineral, mineralizada, filtrada o de agua corriente dependiendo de su procedencia, la cuál debe ser registrada en la etiqueta del producto.
Es que Acqua Panna proviene de La Toscana, Italia, donde emerge de un manantial situado a 900 metros sobre el nivel del mar, en una reserva de 1.300 hectáreas en los Apeninos toscanos, a unos 25 km de Florencia.

Giulia nos contó que el viaje subterráneo demora unos 15 años (!), período durante el cual va adquiriendo sus características propias.
Es un agua mineral natural sin gas, baja en sodio (6,4 mg/L) bastante baja en comparación con otras aguas que poseen generalmente entre 40 a 110 mg/L.
El maridaje con vino que le calza (?) es con aquellos que son vinos frescos y frutados y que cuentan con un tono ligero y suave a la vez, además de ir muy bien, cuentan, con los vinos blancos y espumantes.
En el caso de S.Pellegrino tiene la particularidad de ser un agua mineral natural con gas carbónico natural, el agua sale del manantial con su gas original. Esto se produce porque el agua pasa aproximadamente 30 (!) (!) años en un suelo rocoso, con una gran cantidad de minerales y que gracias a la temperatura de la tierra, se gasifica naturalmente.

La fuente de San Pellegrino Terme es en los Alpes italianos del norte, a unos 70 kilómetros de Milán. Los manantiales de aguas termales en la fuente están a una temperatura de 24,5° C después de 30 años de recorrido subterráneo.
Por ejemplo en Argentina no existen manantiales de agua gasificada naturalmente por lo que las marcas locales tienen que gasificar artificialmente.
En este caso el maridaje con vino va mejor con aquellos con cuerpo, bien estructurados, complejos y persistentes. Lógicamente va muy bien con vino tinto.
Pasando en limpio los vinos con taninos y estructura van con agua con gas. Los vinos jóvenes y más fluidos van sin gas.
Más allá de los tecnicismos y las diferencias que uno puede llegar a encontrar es importante tener en claro que el agua, sea de Italia, de Francia, Argentina o lo que sea, es nuestra gran aliada a la hora de tomar alcohol en general y vino en particular ya que nos permite estar hidratados y no dártela en la pera.
Gracias a la gente de Ley Seca y a Stella y equipo por la invitación a una experiencia distinta que me permitió aprender algo nuevo. Salú!

De profesión periodista, desde el año 2014 tengo este espacio en el que comunico el maravilloso mundo del vino. Desde hace más de 3 años realizo contenidos digitales para distintas bodegas y vinotecas de la industria. Acá vas a encontrar crónicas, entrevistas y alguna que otra recomendación. Parte de Argentina Wine Bloggers, fui jurado del Concurso Vino Sub30 edición 2015. Además fui finalista de los Born Digital Wine Awards 2017 y tengo hecho el WSET® L2 Wines & Spirits. Gracias, vuelva prontos!