El año viajero no pudo comenzar de mejor manera que con una visita a Bodega Colomé. Ubicada a unos 130 kilómetros de Cafayate, era una visita que tenía pendiente desde hacía mucho tiempo.
Así las cosas, a mediados de febrero me invitaron a compartir un viaje de prensa que incluyó la visita a los viñedos de Altura Máxima, visita que tendrá su propio post.
Bodega Colomé nació en 1831 y es, ni más ni menos, la más antigua de Argentina en funcionamiento. De hecho ya lleva 190 años recién cumplidos.
Un poco de historia
Claro que esta historia tiene un comienzo y ese se dio cuando Donald y Úrsula Hess, en el año 1998, estaban de viaje por la región y, ya con el objetivo de hacer vino en un terroir de altura, se hacen con lo que hoy es el viñedo El Arenal, cercano a Payogasta.
Es para el año 2000 que adquieren lo que hoy es Bodega Colomé.

Una bodega que además de la antiguedad tiene la particularidad de ser el corazón de un pueblo que lleva el mismo nombre y en el que viven más de 400 personas. De hecho, actualmente más de 70 personas de ese pueblo trabajan activamente en Bodega Colomé.
Un pueblo que, a partir de la llegada de Hess, se vio beneficiado con la construcción de una iglesia, una escuela y hasta un centro comunitario multifuncional.
Sin contar la estación de energía con una turbina de agua que produce su propia electricidad y el depósito de agua de 30.000 m³ que llenan con la toma de toda el agua del Río que nace y muere ahí mismo y se utiliza para proveer al pueblo, a la bodega y al hotel, en ese orden.
Los viñedos
Actualmente dirigida por la segunda generación, Larissa y Christoph Ehrbar, en Bodega Colomé cuentan con 72 hectáreas de las cuales 10 son de viñedos viejos. Y varias de esas hectáreas las recorrimos junto a Andrés Höy, encargado de viñedos de Bodega Colomé.

Entre ellos Santa Jacoba, originario de 1831. ¿Las variedades? Malbec, syrah, tannat y petit verdot.
Además tienen otro viñedo del año 1954 en el que se suman criolla, torrontés, sauvignon blanc, bonarda y cabernet sauvignon.
En cuanto al manejo de los mismos, solían ser biodinámicos certificados pero en 2014 dejaron de hacerlo ya que, luego de varios estudios e intentos, no podían contra las hormigas y perdían hasta el 30% de la cosecha.

Actualmente las combaten con aplicaciones sectorizadas según la ubicación que tengan en los viñedos y no han dejado de utilizar aquellas cosas que consideran útiles de la biodinámica, tales como la presencia de ovejas (unas 400) y el uso de piretro, planta que usan como insecticida natural.
La bodega
Luego de la recorrida por los viñedos fue momento de visitar la bodega en sí y lo hicimos junto a Thibaut Delmotte, enólogo de Bodega Colomé.
En la misma cuentan con 800 litros de capacidad en tanques de fermentación y la estrella es la selectora óptica.
Una herramienta que regulan de acuerdo a la variedad que van a desgranar y a la calidad que quieren obtener. Básicamente se configura qué uvas quieren eliminar y la máquina hace el resto.

Thibaut nos contó que llegan a seleccionar unos 10 mil kilos por día. Sumado a los ajustes que hacen en cuanto al punto de madurez, cosechando antes, logran llegar a mejores fermentaciones que no se retrasan.
Algunos de los vinos que probamos
Por supuesto que la visita incluyó vinos, y varios. Al comienzo de la mano del Torrontés se le fueron sumando el resto de vinos. Y entre ellos el Estate Malbec, vino que ocupa un lugar especialísimo en la historia de este blog.



Entre almuerzos y cenas fueron una sucesión de vinos que nos permitió hacer una suerte de recorrido del trabajo que viene haciendo Thibaut, enólogo desde el 2005, y todo su equipo.
Así a los que les mencioné más arriba se le sumaron Colomé Reserva 2005 y 2008, dos vinos que se mostraron en su punto óptimo de disfrute y resultaron un gran ejemplo de lo bien que envejecen algunos vinos argentinos.
Más acá en el tiempo, y en la filosofía de vinificación por qué no, otro destacado fue el Colomé 1831 Cabernet Sauvignon, un tinto frutado, sabroso y con un perfil fresco.



Otros de los vinos que pudimos probar fueron Lote Especial Syrah y Lote Especial Tannat, este último TOP5 de los Decanter Wine Awards 2020.
Dos vinos que muestran 2 variedades que generalmente no ocupan las primeras planas pero que, más allá de lo subjetivo de los premios, en estos casos ofrecen un perfil más fresco y de menor concentración.
El museo James Turrell
Muy cercano a la bodega se encuentra el James Turrell Museum, museo que es parte de la Hess Art Collection.
Inaugurado el 22 de abril de 2009, después de 18 meses de construcción e instalación, es el que más obras de este artista tiene en todo el mundo. En su interior no hay obras colgadas o esculturas, solo luz.
Y con esa luz las obras hacen que uno intuya que hay paredes o límites que nos restringen, pero que no podemos verlos conscientemente. En resumen, un viaje indescriptible.

Hasta acá la crónica de lo que fue una visita que duró 3 días y de la que todavía falta que les cuente todo lo que fue la visita en El Arenal y Altura Máxima, los viñedos restantes que tiene Bodega Colomé.
Gracias a Ana y todo el equipo por la experiencia. Salú.
¿Te gustó lo que leíste? ¡Invitame un cafecito!


De profesión periodista, desde el año 2014 tengo este espacio en el que comunico el maravilloso mundo del vino. Desde hace más de 3 años realizo contenidos digitales para distintas bodegas y vinotecas de la industria. Acá vas a encontrar crónicas, entrevistas y alguna que otra recomendación. Parte de Argentina Wine Bloggers, fui jurado del Concurso Vino Sub30 edición 2015. Además fui finalista de los Born Digital Wine Awards 2017 y tengo hecho el WSET® L2 Wines & Spirits. Gracias, vuelva prontos!