Si en la última década hubo alguien que nos enseñó a mirar lo que pasa bajo nuestros pies en un viñedo, ese fue Guillermo Corona, quien presentó Raíces del Vino, su nuevo libro.
Conocido popularmente como el “Geografía del Vino“, Guille se convirtió en una fuente de consulta ineludible para agrónomos y enólogos (y bloggers je!) que buscaban entender la complejidad de los suelos mendocinos.
Raíces del Vino es una obra que promete democratizar ese conocimiento técnico y explicar, de una vez por todas, por qué el vino de Mendoza sabe cómo sabe.
Guillermo ya había publicado su primer libro, justamente Geografía del Vino, que en su momento fue un hito absoluto: una suerte de biblia cartográfica que mapeó la provincia con un nivel de detalle inédito. Sin embargo, era una obra densa, técnica y pensada casi exclusivamente para profesionales o geeks de la geografía.
Con Raíces del Vino el enfoque cambia radicalmente. Corona baja la complejidad sin perder rigor científico. Es un libro “Apto Para Todo Público” (ATP), diseñado tanto para el consumidor entusiasta como para el estudiante que quiere entender las variables que definen la calidad y el estilo de un vino.
Ahora bien, ¿de qué se trata Raíces del Vino? Bueno, el eje central del libro no es recorrer distrito por distrito, sino explicar los factores que construyen el vino. Corona se centra en desglosar las variables climáticas y geológicas que impactan en la copa.
Así, explica cómo la temperatura, la radiación solar, la altura y, por supuesto, el suelo, moldean el perfil de un malbec o un cabernet.
El autor propone un recorrido por lo que él llama las “raíces” de la identidad vitivinícola y para eso incluye zonas tales como Las Compuertas, Agrelo, Gualtallary, San Pablo, Los Chacayes y Altamira.
Y claro, incluye un repaso por Luján de Cuyo, la Primera Zona y el Valle de Uco.
Historia, infografías, fotos, mapas, testimonios de algunos protagonistas de cada zona, la verdad que a Raíces del Vino no le falta nada.
Hablando con colegas y otros actores de la industria coincidíamos en que faltaba una publicación que explicara la agronomía y el clima de Mendoza con un lenguaje claro, lejos de los tecnicismos académicos. Y en este caso, Guille logra traducir la geofísica al idioma del bebedor.
En Raíces del Vino uno puede entender mejor de qué se trata el entorno natural que termina definiendo el líquido que llega a nuestra mesa.
Felicidades Guille! Acá se consigue Raíces del Vino. Salú!
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